La Policía Nacional ha detenido a 76 personas acusadas de perpetrar estafas por Internet, en el mayor despliegue realizado por las Fuerzas de Seguridad contra el fraude en la Red. La investigación, denominada 'operación Ulises', se ha desarrollado hasta ahora en todas las comunidades autónomas, a excepción de Extremadura y de Melilla. No obstante, en los próximos días se extenderá a otros países, ya que las autoridades españolas han dado la alerta a través de los canales de Europol e Interpol.
Según el Ministerio del Interior, los arrestados -más de la mitad, españoles- empleaban diferentes estrategias para cometer sus fraudes: una de ellas consistía en la venta o subasta de productos que nunca llegaban al comprador. En otros casos, se trataba del 'phising', es decir, los delincuentes realizaban transferencias bancarias no consentidas, tras haber obtenido las claves de acceso de las víctimas a la banca electrónica.
Con esos datos, podían desviar el dinero de los afectados hacia otras cuentas sin dificultad, aparentando que eran operaciones ordenadas por el titular. Los fraudes detectados hasta ahora oscilan entre los 400 y los 10.000 euros, aunque en total suman tres millones.
Más víctimas
De todos modos, esa cifra es provisional. La Policía cree que, al tratarse de delitos cometidos a través de Internet, en los próximos días pueden aparecer miles de nuevos perjudicados tanto en España como en otros países. Precisamente, los responsables de la 'operación Ulises' están analizando los ordenadores que han incautado a los detenidos con el propósito de identificar a más víctimas y a otros posibles estafadores.
De los arrestados 47 son españoles, 5 ucranianos, 5 guineanos, 4 rumanos, 2 rusos y 2 marroquíes. Los otros diez son un holandés, un suizo, un venezolano, un alemán, un uruguayo, un brasileño, un armenio, un jamaicano, un camerunense, un argentino y un moldavo.
La Policía y la Guardia Civil han recibido instrucciones para que intensifiquen las operaciones contra los fraudes en la Red y expliquen a los ciudadanos cómo tomar precauciones. El Ministerio del Interior recomienda no hacer caso de los mensajes de correo electrónico enviados por supuestas entidades bancarias o por la Agencia Tributaria, en los que solicitan datos personales. También aconseja buscar comercios electrónicos que inspiren suficiente confianza y recelar de los precios muy bajos.
Para proteger a los internautas del 'phising', el Banco de España rechazó recientemente la pretensión de los bancos y las cajas de ahorro de hacer recaer exclusivamente sobre los usuarios la responsabilidad en los fraudes de la Red. La institución emisora argumentó que los consumidores son las víctimas y no los autores de las de estafas. Y recordó que, a fin de cuentas, las operaciones delictivas se realizan por un canal que las propias entidades financieras ofrecen a los clientes, de modo que ellas deben tomar medidas de protección.
Según el Ministerio del Interior, los arrestados -más de la mitad, españoles- empleaban diferentes estrategias para cometer sus fraudes: una de ellas consistía en la venta o subasta de productos que nunca llegaban al comprador. En otros casos, se trataba del 'phising', es decir, los delincuentes realizaban transferencias bancarias no consentidas, tras haber obtenido las claves de acceso de las víctimas a la banca electrónica.
Con esos datos, podían desviar el dinero de los afectados hacia otras cuentas sin dificultad, aparentando que eran operaciones ordenadas por el titular. Los fraudes detectados hasta ahora oscilan entre los 400 y los 10.000 euros, aunque en total suman tres millones.
Más víctimas
De todos modos, esa cifra es provisional. La Policía cree que, al tratarse de delitos cometidos a través de Internet, en los próximos días pueden aparecer miles de nuevos perjudicados tanto en España como en otros países. Precisamente, los responsables de la 'operación Ulises' están analizando los ordenadores que han incautado a los detenidos con el propósito de identificar a más víctimas y a otros posibles estafadores.
De los arrestados 47 son españoles, 5 ucranianos, 5 guineanos, 4 rumanos, 2 rusos y 2 marroquíes. Los otros diez son un holandés, un suizo, un venezolano, un alemán, un uruguayo, un brasileño, un armenio, un jamaicano, un camerunense, un argentino y un moldavo.
La Policía y la Guardia Civil han recibido instrucciones para que intensifiquen las operaciones contra los fraudes en la Red y expliquen a los ciudadanos cómo tomar precauciones. El Ministerio del Interior recomienda no hacer caso de los mensajes de correo electrónico enviados por supuestas entidades bancarias o por la Agencia Tributaria, en los que solicitan datos personales. También aconseja buscar comercios electrónicos que inspiren suficiente confianza y recelar de los precios muy bajos.
Para proteger a los internautas del 'phising', el Banco de España rechazó recientemente la pretensión de los bancos y las cajas de ahorro de hacer recaer exclusivamente sobre los usuarios la responsabilidad en los fraudes de la Red. La institución emisora argumentó que los consumidores son las víctimas y no los autores de las de estafas. Y recordó que, a fin de cuentas, las operaciones delictivas se realizan por un canal que las propias entidades financieras ofrecen a los clientes, de modo que ellas deben tomar medidas de protección.
El Correo
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